FICCIÓN - LARGOMETRAJE
La fotografía de la bicicleta parte de la necesidad de incorporar la ciudad como un personaje mas, un personaje, que siempre de fondo, enmarca la acción de los protagonistas. Una cuidad vista en proceso de transformación y por ello en los limites, de los barrios modernos con los antiguos, de lo nuevo/viejo con el campo o el mar. Nuestra idea fue acercarse desde el blanco y negro para visualizar esta ciudad y mantener a los actores con un tono de piel amable y natural, por otro lado buscamos el contraste, con negros densos y blancos vibrantes sin que estos "rompieran" con una perdida excesiva de detalle o un tono "plástico" propio de los sistemas de vídeo. Usamos en general lentes angulares y en los exteriores diafragmas relativamente altos (para HD). Los referentes principalmente para la cuidad fueron las imágenes del Ladrón de bicicletas y para el color y la atmósfera (la limpieza de líneas y la condición cromática) de la pintura de Charris, también la obra de Kirchener "Cruce junto al parque Schöneberg" fue significativa para la conceptualización de la fotografía.